La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) advirtió que el sistema alimentario mundial es más vulnerable y susceptible a episodios extremos de volatilidad de precios, y para hacer frente Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA) deberá hacer uso de productos financieros derivados.

“Eventos geográficamente lejanos pueden propagarse a los mercados nacionales mucho más rápidamente que antes. La mayor vulnerabilidad está siendo ocasionada por un aumento de los fenómenos metereológicos extremos, volatilidad tipos de cambio y aumento de tasas de interés”, dijo el secretario de Hacienda , Rogelio Ramírez de la O.

“A fin de afrontar la volatilidad a corto plazo, FIRA deberá atender cada vez más la contratación de esquemas derivados en el mercado de productos básicos para balancear su cartera de riesgos, tales como cobertura de precios en mercados de futuros y esquemas financieros y menos costosos de seguro agropecuario”, añadió.

Durante su participación en la inauguración de la conferencia de Inclusión Financiera en el Medio Rural, Septuagésimo aniversario de FIRA, el funcionario advirtió que el reto no es fácil de abordar, pero en estos esquemas de administración de riesgos disminuye el riesgo percibido por los intermediarios financieros y se beneficia de manera directa a los productores.

 

“La volatilidad impacta los márgenes esperados y con ello la decisión de producir o de sembrar; en el mismo sentido, esquemas de servicios de garantía que actualmente se ofrecen deberán de usarse a fin de que, sin afectar el patrimonio de la institución, puedan elevar su atractivo o ser más funcionales en el marco de operación”, agregó.

 

El secretario abundó en que esquemas diferenciados y enfocados por sectores o grupos de cultivo, zonas de producción y un alineamiento con la política pública agropecuaria del gobierno son una ruta a seguir, a lo que se suma asistencia técnica, capacitación y un extensionismo más eficiente para elevar la productividad y sustentabilidad ambiental.

En este sentido, recordó que la conservación del medio ambiente es una condición obligada del desarrollo sustentable, pero México ocupa uno de los primeros lugares en tasas de deforestación en el mundo, pues para 2018 se estimaba una tasa anual de deforestación de 166,337 hectáreas, lo que representa más del doble que 17 años atrás, cuando se estimaba una tasa total de 79,677 hectáreas deforestadas.

En términos de conservación de suelo y agua también hay mucho por hacer, reconoció la SHCP, ya que el sector agropecuario de México utiliza el 78% del agua extraída. Un porcentaje alto de la contaminación de los cuerpos de agua proviene de las actividades agropecuarias. En suelos se ha identificado que la mayor degradación del país se debe a la deforestación asociada a cambios de uso del suelo hacia actividades agropecuarias.

Para contrarrestar esto, los fideicomisos han participado en la emisión de bonos verdes y sociales por un total de 27,301 millones de pesos. 15.6% del saldo total de la cartera de FIRA son proyectos catalogados con estos principios.