El peso mexicano se apreció ligeramente el miércoles tras una sesión de fuerte volatilidad después de que se dio a conocer la victoria electoral de Donald Trump en Estados Unidos, cuyas políticas comerciales son vistas como lesivas para la economía mexicana.
La moneda mexicana cerró en 20.08 por dólar, con una leve ganancia de un 0.08% frente al precio de referencia de Reuters del martes, luego de llegar a debilitarse durante la madrugada a hasta 20.80 unidades, un nivel no visto desde agosto de 2022.
“El mercado estaba bastante posicionado para una victoria de Trump y lo que estamos viendo ahora es básicamente una toma de utilidades”, afirmó Erick Martínez, estratega de tipo de cambio de Barclays. “Hacia adelante, para nada creo que ya sea este un punto de inflexión. No veo muchas condiciones para una apreciación más sostenida de la moneda”, agregó.
El exmandatario, quien ha amenazado reiteradamente con imponer aranceles a varios productos mexicanos, incluidos los autos, fue elegido nuevamente para ocupar la presidencia, en un regreso al poder en el que además su partido contaría al menos con la mayoría en el Senado.
Los mercados temen que sus posturas proteccionistas se conviertan en un duro desafío en la próxima revisión del pacto comercial de Norteamérica, T-MEC, que se calcula representa más de la mitad del PIB mexicano.
Aun así, analistas destacaron que la reacción del peso fue mucho menos inestable que durante la jornada electoral de 2016, cuando se desplomó casi un 8.5%, a un mínimo histórico en ese momento, tras conocerse la primera victoria de Trump en las urnas.
“Podríamos decir que Trump es un viejo conocido”, dijo Mauricio Fernández, especialista de mercados latinoamericanos del bróker digital Capital.com.
Sin embargo, la atención estará puesta en sus próximos discursos ya como presidente electo y en el cumplimiento de sus promesas.
Un endurecimiento de sus palabras contra México podría exacerbar las presiones sobre la moneda, lo que llevaría a una intervención de las autoridades cambiarias en caso de que se observen movimientos desordenados en el mercado, coincidieron analistas, aunque de momento no es el escenario central.
“Por ahora el movimiento no es tan agresivo. El escenario no está para que la Comisión de Cambios intervenga”, opinó Jacobo Rodríguez, especialista financiero de la firma de análisis Roga Capital.
El peso, que hasta hace algunos meses era una de las divisas más estables frente al dólar, comenzó en junio un rápido debilitamiento luego de las elecciones presidenciales, con lo que ahora acumula una pérdida de un 18.5% en lo que va del año, y los analistas creen que las presiones podrían continuar, al menos en el corto plazo.
La depreciación del peso del martes, también coincidió con la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de desestimar las acciones de inconstitucionalidad presentadas en contra de la reforma judicial, por la que magistrados, jueces y ministros serán electos por voto popular.
Los mercados esperan que la Reserva Federal (Fed) anuncie el jueves un nuevo recorte de tipos de interés empujando al banco central mexicano a continuar con su senda de rebajas a la tasa clave en su anuncio de la próxima semana. También este jueves, se darán a conocer en México cifras de inflación.
Por lo pronto, en el mercado bursátil, el referencial índice el S&P/BMV IPC .MXX subió un 1.77% a 51,732.46 puntos, revirtiendo las pérdidas de un 2.65% con las que abrió la sesión, impulsado principalmente por las acciones de dos de las principales cementeras del país.
“¿Qué se está viendo? Una ventana de oportunidad, en un mercado bastante barato”, dijo Benjamín Álvarez, gerente de análisis bursátil de CIBanco.
Los títulos de Cemex encabezaron las alzas con un 8.63% más a 11.58 pesos, seguidos por los de GCC, que sumaron un 7.05% a 177.83 pesos, animados por las perspectivas de que podrían beneficiarse de las propuestas de Trump de impulsar proyectos de infraestructura en su país, coincidieron analistas.
Ambas compañías generan gran parte de sus ingresos en el mercado estadounidense.
En cuanto a la deuda gubernamental, el rendimiento del bono a 10 años MX10YT=RR descendió cuatro puntos base a un 9.94%, mientras que la tasa a 20 años MX20YT=RR bajó 16, a un 10.20%.
(Con información de Reuters y Aristegui Noticias)