El presidente Andrés Manuel López Obrador atendió nuevamente esta mañana las manifestaciones que han afectado el tráfico en la autopista México-Puebla, acusando a los conservadores de exigir “mano dura” no porque les afecte, pero porque después quieren acusarlo de ser represor y autoritario.
Luego de que ayer se llegará a un acuerdo para desbloquear intermitentemente la vialidad tras dos días de cierre por manifestaciones de campesinos, el mandatario reiteró que se les garantizará el pago por las afectaciones vividas durante su construcción, eso si, de acuerdo con el avalúo federal.
Con eso, volvió a hacer un llamado a los campesinos a no caer en los engaños de sus abogados, quienes buscan lucrar de la situación: “Entonces el llamado es a los campesinos a decirles, si tienen derecho, si es un asunto justo, no se preocupen”.
En tanto, aprovechó los sucesos para lanzarse nuevamente contra quienes llama “conservadores”, acusándolos de ser “muy hipócritas”.
No es que quieran mano dura, no es que realmente les afecte, n,o lo que quieren es que nosotros actuemos mal, en forma autoritaria, represiva, y ellos mismos nos van a acusar de intolerantes, ineficientes, ya los estoy viendo.
¿Qué ocurre en la México-Puebla?
El jueves, un carril de la autopista México-Puebla será abierto de manera permanente según informó la Secretaría de Gobernación de Puebla luego de llegar a este acuerdo con los ejidatarios de Ignacio López Rayón que mantienen bloqueada dicha vía en exigencia del pago justo por sus tierras.
“Se acordó que se dejará el libre tránsito en un carril de manera permanente para evitar mayores afectaciones a la ciudadanía, en tanto se desahoguen las mesas de diálogo para el pago correspondiente, a través de las instancias federales y carreteras de cuota”, indicó la Secretaría de Gobernación de Puebla.
Jorge Portilla, representante legal de los ejidatarios de Ignacio López Rayón, explicó, que no se expidió un decreto de expropiación de tierras para la construcción de la autopista México-Puebla.
Ante ello, hace años se dictó una sentencia en firme para que el Gobierno de México pague una indemnización a más de 100 ejidatarios y sus familias.
