Se espera que el crecimiento se enfríe este año y que los aranceles aumenten, aunque estas alzas no se traducirán necesariamente en guerras comerciales con todos los países.

La economía estadounidense se expandió a un ritmo sólido en el 2024, ayudada por el gasto de los consumidores y del gobierno, señalando su resistencia mientras el presidente Donald Trump toma las riendas.

En el periodo de octubre a diciembre, la mayor economía del mundo creció a un ritmo anualizado de 2.3%, según el Departamento de Comercio, lo que supone una desaceleración respecto a la tasa de 3.1% registrada entre julio y septiembre. Así el crecimiento de todo el 2024 resultó en 2.8 por ciento.

El gasto del consumidor, la inversión y el gasto gubernamental estuvieron entre los impulsores del crecimiento del año pasado, según datos del Departamento de Comercio.

La economía estadounidense se ha mantenido sólida a pesar de las altas tasas de interés, ayudada por un mercado laboral resistente con bajo desempleo y salarios que siguen creciendo.

Esto ha permitido a los consumidores seguir gastando, incluso mientras recurrían a los ahorros acumulados durante la pandemia de Covid-19.

“El gasto del consumidor, tanto en bienes como en servicios, siguió impulsando una parte sustancial del crecimiento”, dijo Joel Kan, economista jefe adjunto de la Asociación de Banqueros Hipotecarios.

Los últimos datos indican que la economía y el mercado laboral siguen siendo fuertes, en consonancia con la opinión del banco central estadounidense, señaló.

Los salarios han seguido superando la inflación, mientras que los huracanes recientes desencadenaron una “demanda de reemplazo” de artículos como vehículos, dijo la economista jefe de KPMG, Diane Swonk, en una nota.

Otro factor fueron los “efectos de riqueza masivos derivados del marcado aumento del valor de los activos y de las viviendas”, que impulsaron el gasto en particular entre los hogares con mayores ingresos, añadió la economista jefe de Nationwide, Kathy Bostjancic.

Pero Swonk advirtió que “la economía sigue viéndose mejor en el papel de lo que la mayoría de los estadounidenses creen”.

Gráfico EE