Gur Meggido, periodista de The Marker, consideró que no hay obstáculos para que el gobierno israelí entregue los documentos a México.
El periodista israelí Gur Meggido, del periódico The Marker, reveló la existencia de un arbitraje secreto entre los empresarios Avishai Neriah y Uriel Ansbacher, en el cual se discutieron inversiones millonarias realizadas en el expresidente Enrique Peña Nieto y que abrieron la puerta para que obtuvieran contratos durante su sexenio.
Según los documentos presentados ante un tribunal civil de Israel, ambos empresarios habrían invertido hasta 25 millones de dólares en el exmandatario mexicano al inicio de su presidencia.
En entrevista con Aristegui En Vivo, reveló los detalles del arbitraje, cómo obtuvo la información y qué tendría que pasar para que las autoridades mexicanas tengas acceso al caso.
“Básicamente, [Avishai Neriah y Uriel Ansbacher] eran socios en el pasado […] y tenían un acuerdo por el que, -dado que ambos estaban vinculados al expresidente-, se repartirían México, por más ridículo que pueda parecer”, explicó Meggido. Detalló que el conflicto legal surgió cuando ambas partes se acusaron de invadir el “territorio” del otro.
Ansbacher exigió que Neriah le pagara su parte de los 25 millones de dólares invertidos, que había dado dado a cambio de tres reuniones privadas con Peña Nieto que nunca sucedieron.
“Una de las partes, Ansbacher, exigió parte de su supuesta inversión en el presidente. Utilizan un lenguaje ambiguo, por lo que no dicen directamente ‘presidente’, sino que utilizan la letra ‘noon’, que en hebreo es la primera letra de la palabra ‘presidente’”, explicó.
Según Meggido, los árbitros —tres rabinos que actuaron bajo la ley religiosa judía— concluyeron que el acuerdo perdió validez una vez Peña Nieto terminó su mandato.
El periodista subrayó que no hay ninguna duda de que el arbitraje se refiera a Enrique Peña Nieto.
“No, no puede haber ninguna duda porque se refieren a un presidente que fue elegido en México en 2012 y que terminó su mandato en 2018. Solo conozco un presidente mexicano que cumpla con estos requisitos”, dijo Meggido. Afirmó que fuentes directas también confirmaron que se trataba de Enrique Peña Nieto.
Respecto al arbitraje religioso, Gur Meggido detalló que las partes eligieron resolver el conflicto con base en la ley hebrea. “Eligieron a tres personas que son todas rabinos y estos rabinos tuvieron que dictaminar de acuerdo con la antigua ley judía… concluyeron básicamente que nadie merecía recuperar nada”, dijo. Ansbacher no fue compensado por su inversión, ya que, según el fallo, “también había disfrutado de las puertas abiertas del Gobierno mexicano de acuerdo con esa inversión o como resultado de ella”.
“Los tres árbitros dictaminaron que no hay duda de que se había realizado una inversión de millones de dólares en el expresidente o en el antiguo ‘P’. Ansbacher afirma que la presunta inversión ascendió a 25 millones de dólares”. Aunque Avishai Neriah argumentó que la cifra era menor, ninguno de los empresarios negó la existencia de la inversión.
Respecto al uso de esos fondos, el periodista indicó que los documentos del arbitraje no detallan cómo se utilizaron los 25 millones de dólares, pero una fuente le indicó que “se trataba principalmente de pagar o financiar gastos políticos”. Según Meggido, esa información más específica podría estar en el expediente completo del caso.
El arbitraje incluyó testimonios adicionales, como el del hermano de Avishai Neriah, también rabino. “Parte de la historia tiene que ver con cómo los ingresos comerciales llegaron a Israel a través de sus organizaciones sin ánimo de lucro”, dijo Meggido. También hubo participación de empleados de ambos empresarios, quienes aportaron más testimonios.
Al ser cuestionado sobre si el contenido del arbitraje es publico el periodista respondió que sí.
“Este arbitraje fue llevado a los tribunales civiles israelíes… está abierto a cualquier periodista que tenga permiso para ver los procedimientos. Y eso incluye a todos los periodistas israelíes”, por lo que considera que fácilmente la Fiscalía mexicana podría obtener el arbitraje.
Megiddo explicó que el arbitraje derivó en un proceso civil, ya que es el tribunal quien debe confirmar o anular el fallo.
“Mientras intentaban disputar la aprobación de este arbitraje, tuvieron que presentar la sentencia arbitral como parte de este procedimiento y, por lo tanto, conseguí acceder a ella”, detalló.